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El proyecto Osuna Recuerda de Memoria Democrática que desarrolla la Universidad de Sevilla está sacando a la luz las huellas de la represión franquista en la mujer tras el golpe militar, la guerra civil y la dictadura. En los archivos documentales del cementerio y que se conservan de la época se han recogido los nombres de cinco mujeres que fueron asesinadas y arrojadas en las fosas comunes del cementerio de Osuna. Pero los investigadores que trabajan sobre el terreno han localizado en las fosas comunes halladas hasta la fecha los restos de más mujeres. Esto muestra una forma de represión y violencia con sesgo de género; mujeres que fueron perseguidas y fusiladas y cuyas vidas fueron borradas, sus nombres se ocultaron para mayor agravio. Hay muchos más hombres fusilados pero las mujeres sufrieron una represión en vida, perseguidas, humilladas, maltratadas, malviviendo, y también borradas de los registros, y de la historia, víctimas mujeres que también fueron asesinadas y arrojadas en cunetas. Por tanto, los trabajos de Osuna Recuerda están permitiendo que afloren las huellas -los restos – también de mujeres que desaparecieron en el verano del 36 tras el golpe militar.

La nueva de fase del Proyecto Osuna Recuerda, que comenzó hace unos meses, está dando resultados: se han exhumado los restos de once personas represaliadas de una tercera fosa común localizada en el patio tres del cementerio de Osuna, y se ha identificado una cuarta que se está preservando.

El proyecto Osuna Recuerda es un trabajo de memoria democrática paradigmático en Andalucía por el gran volumen de documentación del que se ha partido, lo que da más posibilidades de identificación de los cuerpos que se recuperen, tal y como explica Oliva Rodríguez, catedrática de Arqueología de la Universidad de Sevilla, que coordina este proyecto.

El trabajo de Osuna Recuerda comenzó en el verano de 2022. De momento, se han recuperado 60 cuerpos de las fosas localizados en el cementerio, donde se buscan a más de 200 víctimas de la represión franquista, de Osuna y la comarca.

El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha valorado desde el camposanto de Osuna el rigor científico de este trabajo y la voluntad de los promotores, con el Ayuntamiento, de alcanzar los objetivos, de localizar, tratar de identificar a las víctimas, reparar su memoria, y las de sus familias. Y ha expresado el compromiso de colaboración del Ejecutivo central con las comunidades autónomas para impulsar los proyectos de memoria democrática.

Hay documentados en Andalucía unos 46.000 represaliados y 700 fosas, según ha indicado el delegado del Gobierno, en este 8 de mayo, día declarado de reconocimiento a los exiliados por la dictadura, unos 50.000 en la comunidad andaluza.

 


La alcaldesa de Osuna, Rosario Andújar, se ha referido a la respuesta social en torno a este proyecto de memoria democrática: al convencimiento de la obligación de los poderes públicos de restaurar la dignidad y la memoria de las víctimas de la represión. También, ha hecho hincapié en el carácter científico de los trabajos.
Detrás de este proyecto trabaja un equipo multidisciplinar, de antropólogos, arqueólogos, historiadores, médicos forenses. En Osuna Recuerda hay una vertiente de divulgación histórica
Los investigadores de Osuna Recuerda mantienen un trabajo constante de localización y diálogo con familias de víctimas. Han enviado las muestras genéticas de 28 allegados al laboratorio de la Universidad de Granada para su identificación.
 
Una vez que se hallen los restos de todas las personas arrojadas en las seis fosas comunes documentadas, el Ayuntamiento de Osuna tiene previsto habilitar un espacio destinado a la memoria histórica y democrática, que, llegado el momento, será ofrecido a los familiares, con independencia y con el respeto a sus deseos.