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El contraste entre el nuevo rumbo imprimido a Lucena, defendido por el equipo de gobierno popular, y los suspensos calificados por la oposición, fundamentalmente, en materia de gestión del agua, la limpieza urbana o la regresión de la seguridad ciudadana imperó ayer, durante algo más de dos horas y media, en la sesión extraordinaria del Debate del Estado de la Ciudad.
El gobierno municipal, después de 16 meses de dirección en la administración local, resaltó su efectividad en resolver problemas bloqueados desde hace años, en el ámbito urbanístico, de infraestructuras, de Personal o de obras.

El alcalde, Aurelio Fernández, incidió en que, con una perspectiva de “equilibrio, cercanía y responsabilidad”, Lucena avanza en su “transformación y modernización”, desde el “diálogo”, y priorizando la mejora de los servicios públicos. El primer edil se congratuló de la resolución de "problemas enquistados" y "atascados".

Ante las apreciaciones de PSOE e Izquierda Unida, confirmó que seguirá recurriendo a la herencia recibida de los anteriores gobiernos socialistas, para explicar o justificar diferentes escenarios. Fernández apostilló que "lo vamos a seguir diciendo" porque "los vecinos tienen que estar informados".

Desde la oposición, con la excepción en la afinidad exteriorizada por Vox, aunque esta formación reclamó más cambios y de forma más veloz, las demás fuerzas políticas, sobre todo el PSOE, verbalizaron fuertes críticas, también, por la subida de los impuestos, además del aumento del coste del propio gobierno municipal, considerado, por los socialistas, como el mayor de la etapa democrática; el incumplimiento de las promesas electorales o la actitud complaciente ante las administraciones superiores por la homogeneidad política del Partido Popular.

Teresa Alonso, por el PSOE, verbalizó el término "tiranía" aludiendo a unos "cortes de agua injustificados" y, también, rechazó "el desprecio y la arrogancia". En nombre de Ciudadanos, Jesús López, consideró "hipocresía" la actitud del portavoz popular, Francis Aguilar, al escudarse en los datos sobre seguridad ciudadana ofrecidos por la subdelegada deL Gobierno en Córdoba. En relación a la limpieza, Miguel Villa, de IU, alertó sobre la visibilidad de "mugre" y espacios abandonados y descuidados. Por su parte, Laura Sánchez mencionó la vigencia de "un pacto" con el PP y la sintonía entre las propuestas y Francisco de Mora, concejal no adscrito, reclamó "un proyecto de ciudad".

Concluyó Fernández anunciando un triple aumento, en el presupuesto de 2025, de programas sociales. La partida destinada al alquiler de vivienda para jóvenes subirá a 60.000 euros; el Consistorio establecerá subvenciones de 400 euros al nacimiento o adopción; y el importe asignado a las becas del material escolar se elevará hasta los 80.000 euros.