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Últimas horas de negociaciones y conversaciones entre el equipo de gobierno de Lucena y la oposición para lograr un acuerdo presupuestario. Desde el PSOE continúan expresando confianza acerca de la aprobación de las cuentas municipales, del ejercicio 2023, en el Pleno de mañana.

Por el momento, el debate de los presupuestos no aparece en el orden del día. En consecuencia, debería incluirse en la sesión por vía de urgencia.

El alcalde, Juan Pérez, ha enfatizado la relevancia de lograr validar el guion económico antes del inicio del próximo año por las extensas dificultades coyunturales que presenta su configuración.

La inflación ha provocado que se duplique el gasto en combustible y en energía eléctrica y, además, el Ayuntamiento habrá de incrementar, notablemente, con estímulos económicos añadidos, los ingresos derivados a sus empresas dependientes.

Pérez ha reiterado que el proyecto presupuestario es “tremendamente complicado”. Como “otro esfuerzo añadido”, ha hecho alusión a “el estímulo económico” que precisan las empresas municipales como EPEL y Suvilusa. Así, han de aportarse cantidades para desembolsos de funcionamiento y de los préstamos.

En esta ocasión, para EPEL, ha de insuflarse dinero “para poder redactar el proyecto y la dirección de obra, del nuevo aparcamiento, y, en el segundo caso, para atender intervenciones en varias viviendas, propiedad de Suvilusa, para sustituir las ventanas y hacerlo más eficiente”.

Además, la sequía de los últimos meses también ha desajustado, de manera significativa, el balance financiero de Aguas de Lucena.

En las últimas horas, la vía más factible para ratificar el proyecto presupuestario del equipo de gobierno apunta a un consenso con el PP y que, como mínimo, reportaría la abstención de los populares.