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Violento asalto a la ermita de Nuestra Señora del Castillo de Carcabuey con la intención de robar enseres y objetos pertenecientes a la patrona de la localidad.

Los dos ladrones, finalmente detenidos en la localidad jiennense de Guarromán, fracturaron la vidriera del santuario con una piedra, además de la luna que antecede al camarín, y causaron importantes destrozos en el conjunto de la imagen, de la Virgen del Castillo, y en el rostro.

La hermandad ha debido cerrar el santuario y el restaurador prieguense, Fernando Cobo, acomete la reparación de la talla mariana. Los hechos acaecieron el pasado 28 de mayo y, dos vecinas del municipio, advirtieron este grave incidente al contemplar la rotura en los cristales exteriores. La cofradía no ha distribuido fotografías de los desperfectos ocasionados en la imagen.

Los dos autores de los hechos, al irrumpir con una alta agresividad sufrieron cortes con los cristales, provocando un reguero de sangre, además de otras huellas. De hecho, la herida que sufrió en un brazo uno de los ladrones, resultó decisiva para su identificación en un hospital de Guarromán. Ambos detenidos procedían de Toledo y sobre uno constan antecedentes policiales y permanecía activa una orden de busca y captura.

Juan Serrano, hermano mayor de la cofradía de la Virgen del Castillo, en Hoy por Hoy Lucena, narraba que “los objetos de la Virgen estaban arrancados” y que los malhechores actuaron “con brutalidad”. Las consecuencias muestran “a unos enseres de la Virgen que han sufrido deterioros” y “el rostro de la imagen tienen un desconchón, no es grande, pero sí importante”.

Al conocer este suceso, se personaron en la ermita la Policía Local y la Policía Judicial. El proceso de restauración ya ha logrado solventar los desperfectos en el rostro de la Virgen del Castillo.