Andalucía Centro

El distanciamiento y las discrepancias entre el grupo municipal del Partido Popular en Montilla y la dirección local de la formación, lejos de difuminarse o aplacarse, se antojan irreconciliables.

El Comité de Derechos y Garantías del PP Andaluz ha desestimado la solicitud de expulsión y suspensión de militancia de cuatro de los cinco concejales que representan al PP en el Ayuntamiento.  Estos cuadro ediles, Francisco José Delgado, Cristina Alguacil, Celia Sánchez y Ana Belén Feria, acordaron relevar al portavoz en el Consistorio, Javier Alférez, afín a la presidenta actual, Auxiliadora Moreno, y quien forma parte, en estos momentos, de la junta local. Esta decisión de los concejales provocó la apertura de un expediente sancionador, concluido, según han informado Delgado, actual portavoz, Alguacil, Sánchez y Feria, sin ninguna consecuencia disciplinaria.

La intensa convulsión en el PP de Montilla no ha cesado desde las elecciones municipales de 2019, cuando el PSOE obtenía mayoría absoluta en los comicios y el PP perdía dos actas, con respecto a 2015.

Un año después, renunciaba a su asiento en el Ayuntamiento la candidata a la alcaldía, Inmaculada Luque; y, a continuación, la dirección provincial disolvía la junta local y resolvía la conformación de una gestora liderada por José Repiso. Meses después, en mayo de este año 2021, Auxiliadora Moreno se convertía en la nueva presidenta local y, finalmente, en septiembre, se abría el expediente sancionador contra estos cuatro concejales.

En el comunicado que suscriben Delgado, Alguacil, Feria y Sánchez, expresan gruesos y explícitos reproches contra la dirección local y desaprueban, de manera diáfana, la anterior labor de Javier Alférez como portavoz.

Los cuatro ediles tachan de "atropello" o "despropósito" la determinación adoptada, desde las direcciones local y provincial contra ellos, puesto que, argumentan, no existía ninguna prueba y el cambio de portavoz se efectuó, prosiguen, siguiendo escrupulosamente las directrices del PP. Acusan a Auxiliadora Moreno de proceder con "mala intención" y por "revancha" hasta convertir al PP de Montilla en un "campo de batalla".

Relatan que, antes, el Partido Popular de Córdoba impuso como portavoz a Javier Alférez, en principio, de forma accidental y provisional. Para concluir, aducen que las razones para afrontar el reemplazo de Alférez se basaron en su dejadez de funciones, el poco trabajo como oposición, ausencias injustificadas o falta de información al resto de compañeros, así como pérdida de confianza por la comisión de repetidos hechos graves.