Andalucía Centro

Ha fallecido la madre Adriana de Jesús Crucificado, priora de la comunidad de las Carmelitas Descalzas de Lucena, en el convento de San José y Santa Teresa. En los últimos años, el nombre de esta monja alcanzaba sobresaliente popularidad tras recibir varias llamadas del papa Francisco. Sor Adriana, al igual que otras dos componentes más de la comunidad, igualmente argentinas, guardaba una larga y cercana relación con el Papa desde su etapa como arzobispo de Buenos Aires.

Respetando su voluntad, ha sido velada en el coro por las hermanas de la congregación y cientos de fieles, según ha informado la Diócesis de Córdoba, acudieron en la mañana del sábado, 16 de septiembre, a rezar por la fallecida, tanto en la celebración matinal como en la misa exequial, presidida, a las 17:00 horas, por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, y concelebrada por los párrocos de Lucena.

La vida religiosa de la madre Adriana comenzó a los 18 años en el Carmelo del Corpus Christi, en Buenos Aires, y ya desempeñó cargos de responsabilidad. A los 20 años de trayectoria consagrada, fortaleció su vocación, para ayudar a los Carmelos de España, quienes solicitaban monjas para poder continuar la entrega carmelitana.

Su compromiso, definido como "fiel y alegre", en España, ha transcurrido durante 28 años, primero en el Carmelo de Castellón y, a continuación, en Lucena, en una etapa de 23 años.

Sus hermanas de la comunidad señalaban que el municipio ha sido “una ciudad muy querida para ella” porque suponía “continuar la vida carmelitana en un Carmelo de más de 400 años”.

Desde la Diócesis exponen que “se entregó fiel hasta la muerte, entregando su alma fiel y feliz”. Falleció el viernes día 15 de septiembre.