Cabra

Los sindicatos avisan de que la macroárea en el sur de Córdoba crea "inseguridad" y los pacientes "deambularán"

Miércoles, 19 Enero 2022 14:10 Redaccion 
La Junta de Personal del Área sostiene que la Junta oculta información y critican la disparidad de criterios
Junta de Personal en el Área Sanitaria Sur de Córdoba. Junta de Personal en el Área Sanitaria Sur de Córdoba.
La Junta de Personal del Área Sanitaria Sur de Córdoba también se opone, unánimemente, a la extensión de este distrito, con la integración, ya materializada, de los hospitales de Montilla y Puente Genil.

Este órgano, integrado por Comisiones Obreras, UGT, Csif, el Sindicato Médico, el Sindicato de Técnicos y Satse, reclama la creación, diferenciada y delimitada, de dos áreas en el territorio, una en la Subbética y otra en la Campiña Sur.

Esgrimen que la “saturación” ya compromete al Hospital Infanta Margarita de Cabra, sin capacidad para recibir cargas asistenciales de otros sectores de la provincia. Por ello, desde este organismo confirman la ascendente concertación con la sanidad privada para pruebas diagnósticas y actividad quirúrgica.

Rafael Osuna, miembro de Satse y portavoz de esta Junta de Personal, expone que “entendemos que este añade, supone”, la nueva reconfiguración “una gran complejidad, gran inseguridad, como bien confirmó la delegada de Salud en una recientereunión aquí en el hospital egabrense”.

Al mismo tiempo, entraña, prosigue Osuna, “movilidad de los profesionales, de los pacientes, que podrían deambular por los distintos centros sanitarios”. En este sentido, apunta, además, que “no es oportuno y, en el caso de los profesionales, supondrá dificultad añadida para contratar a médicos”.

Aluden, también, a la disparidad de criterios ya que en el Campo de Gibraltar y en la geografía jiennense, con condiciones similares y análogas, la Junta sí ha implantado dos áreas sanitarias. En consecuencia, sospechan que la consejería de Salud oculta información y, por tanto, exigen transparencia.

En definitiva, auguran que el volumen de población, con 260.000 habitantes, y de infraestructuras sanitarias a gestionar, aparte de la amplitud geográfica, redundará en incertidumbre y degradación de la cobertura sanitaria pública.