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La primera intervención arqueológica para localizar a las víctimas de ‘El Aguaucho’, cinco jóvenes de Fuentes de Andalucía que fueron torturadas y asesinadas en la guerra civil, ha concluido sin resultados. Las excavaciones comenzaron el pasado 9 de octubre y han terminado sin que se hayan encontrado restos en el pozo donde, según fuentes documentales y la investigación, fueron arrojadas las víctimas tras los crímenes.
 
La Junta de Andalucía ha informado en un comunicado que la intervención arqueológica ha tenido un resultado infructuoso, según la información proporcionada por el equipo técnico dirigido por Elena Vera, encargado del desarrollo de la intervención. Próximamente presentarán un informe final de los trabajos realizados,
 
La actuación específica, que se inició el pasado 9 de octubre en un pozo en el cortijo de ‘El Aguaucho’, en el término municipal de La Campana (Sevilla), ha alcanzado la base del pozo, a una profundidad de 8,30 metros, en el que han sido encontrados materiales correspondientes al siglo XIX y, por tanto, anteriores al objeto de búsqueda. Sobre ellos, han sido halladas sendas capas de basura y restos óseos de animales y derribo del material del cortijo. Desde ahí hasta la superficie, se encontraron piedras y, y tierra que en los días previos fue analizada de forma minuciosa.
 
El resultado de la intervención arqueológica, reclamada por los familiares de las víctimas y apoyada por la Asociación Memoria Histórica Fontaniega, confirma, según explica el Gobierno andaluz,  el objetivo de los represores con sus víctimas: la ocultación del delito y el intento de hacer desaparecer todo rastro de memoria.
 
La Dirección General de Memoria Democrática de la Junta pide prudencia. Además, se reunirá  la próxima semana con el Ayuntamiento, la asociación memorialista y los familiares de las víctimas para marcar la hoja de ruta a partir de ahora.
 
Esta intervención ha contado con la colaboración de la Dirección General de Memoria Democrática -encargada de sufragar  los trabajos-, los ayuntamientos de La Campana y Fuentes de Andalucía, así como con el propietario actual del cortijo.
 
Los crímenes de El Aguaucho son uno de los episodios más negros de la guerra civil y la represión franquista en Andalucía. En Fuentes de Andalucía hay un monumento en memoria de las víctimas y forma parte de los enclaves de la Memoria Histórica en Andalucía catalogados por la Junta.
 
En Fuentes fueron asesinadas 116 personas, 27 de ellas mujeres.