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Las autoescuelas de la Sierra sur de Sevilla muestran su rechazo al anuncio realizado por la Dirección General de Tráfico de inicio de un proyecto piloto para distribuir de forma equitativa y proporcional la capacidad de examen entre ellas.

La Dirección General de Tráfico ha puesto en funcionamiento este proyecto en la provincia de Sevilla de forma experimental, con dos semanas de duración, y con el objetivo de que se implante con carácter permanente tras el periodo de prueba.

La subdirectora general de Tráfico, María José Aparicio, se lo ha presentado a los representantes de las autoescuelas de la provincia quienes consideran que, en lugar de generar un beneficio, perjudica gravemente tanto a los propietarios como a los alumnos y alumnas de los centros.

El motivo es que la capacidad con la que cuenta cada una de ellas para presentar alumnos a examen es escasa, según indica Francisco Suárez, propietario de una de las autoescuelas que forma parte de la Asociación Provincial de Autoescuelas de la Sierra sur del Centro Desplazado de Écija.

Existe una bolsa formada por el personal que ya ha aprobado el teórico y aun no han obtenido el permiso. Así, la DGT asigna más capacidad de examen a las autoescuelas con mayor porcentaje de aptos en la primera convocatoria y reduce el número de aspirantes en las segundas y sucesivas convocatorias.

El objetivo de la DGT es que los alumnos que acudan a examinarse lo hagan bien preparados pero, según relata Suárez, hay alumnos que “por su situación económica dicen que no dan más clases y los propietarios no podemos obligarlos. Si no va preparado a mí me cuenta como suspenso en la primera convocatoria y eso me reduce más aun el cupo que me han asignado”.
 
 


La Plataforma de Autoescuelas de la Sierra sur de Sevilla advierte de que tomarán acciones legales en el caso en el que se vean gravemente perjudicadas si finalmente este proyecto piloto llega a establecerse en Sevilla.