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27 personas detenidas, en su mayoría, procedentes de países del este, y que permanecen, todas en prisión. Intervenidos más de un millón de cajetillas de tabaco, 750 kilos de tabaco picado, otros 2.000 de cigarrillos liados y dos palés de cigarros defectuosos. La valoración económica estimada bordea los 10 millones de euros.

Este es el balance de la Operación Pastela, contra el contrabando de tabaco, dirigida por la Guardia Civil en las provincias de Ciudad Real y Córdoba.

Delitos de homicidio imprudente, a causa de un incendio acaecido en una nave de Manzanares, en Ciudad Real, suceso que finalmente engendró la Operación Pastela; y otros contra la hacienda pública, contrabando, organización criminal, sobre la venta y distribución de labores de tabaco en el contexto internacional y ocultación de sus beneficios mediante fraudes fiscales, se les imputan a los 27 detenidos.

Las investigaciones y actuaciones practicabas han posibilitado desmantelar una red criminal que exportaba tabaco ilegal, de contrabando, a Inglaterra, Italia y Rusia.  

Los primeros arrestos se produjeron en septiembre del año pasado, en Manzanares, a raíz de una deflagración en la que fallecieron dos personas y 16 resultaron heridas. En colaboración con la Europol, el Instituto Armado interceptó un camión, hallaron pallets de tabaco falsificado y detuvieron a dos personas.

Al inicio de la pasada semana, ya en Santaella, los registros se desarrollaron en tres naves, contiguas unas de otras. Los agentes capturaron a 23 personas, que trabajaban en esta actividad ilícita, y a los dos propietarios de la nave, vecinos de este municipio. La capacidad de producción, en cuatro meses, se calcula en 200 millones de euros.