Iznájar

Iznájar se moviliza este sábado y cortará la A-333 por "el maltrato sistemático" de las administraciones superiores

Miércoles, 02 Octubre 2024 09:21 Redaccion 
El Pleno relata incumplimientos en materia de servicios públicos, carreteras o dotación para programas de Empleo u otras ayudas
Comparecencia en el ayuntamiento. Comparecencia en el ayuntamiento.
Los incumplimientos históricos de las administraciones superiores empujan a Iznájar a movilizarse, este próximo sábado, 5 de octubre, para reclamar unas infraestructuras y unos servicios públicos justos y adecuados.

La corporación municipal, por unanimidad, aprobaba en el último Pleno compartir esta manifestación que culminará con el corte del tráfico en la carretera A-333, a la altura del Puente Fernández.

Desde el Ayuntamiento hablan de “maltrato sistemático”, por parte de la Diputación, la Junta y el Gobierno central y aseguran que permanece en riesgo el futuro de este municipio.

Entre otras reivindicaciones, de largo recorrido y reiteradas negativas, citan la ausencia de inversiones en viviendas sociales, carreteras o colegios, la paralización de la construcción del centro de salud, el cierre del Juzgado de Paz o los recortes en los programas de Empleo y otras ayudas.

Lope Ruiz, alcalde de Iznájar, en Hoy por Hoy Lucena, ha pronunciado "palabras ya de desesperación" puesto que "estamos viviendo unos años" en que "ninguna de las administraciones del Estado" está realizando "ninguna inversión en nuestro municipio, ni se están resolviendo los problemas endémicos que tenemos desde hace tiempo". 

Todo ello, significa el regidor socialista, "se está traduciendo en una pérdida de población, que empieza a ser preocupante, por el deterioro sistemático de las infraestructuras y no nos queda más remedio que la manifestación". 

De igual manera, reclamarán, en esta convocatoria de protesta, el arreglo inmediato de la carretera del margen izquierdo del embalse porque adolece de una “situación calamitosa”.

En definitiva, concluyen desde el Consistorio, estas promesas incumplidas y peticiones desoídas recrudecen la despoblación y elevan la pérdida imparable de habitantes.