Andalucía Centro

Segundo día que no acuden a clase los 230 alumnos del colegio Encarnación Ruiz Porras, de Marinelada, en la Sierra Sur de Sevilla. Los padres han decidido que no llevarán a sus hijos a la escuela hasta que no vuelva a abrir el comedor escolar, que lleva más de tres meses sin servicio. Eso sí, quieren que se reanude en las condiciones previas a la adjudicación de esta actividad a una nueva empresa. En noviembre estas familias impidieron a la adjudicataria que se hiciera cargo del servicio, “con menos monitores y un horario reducido”. Desde entonces,  profesores y padres han colaborado para atender a estos niños en el comedor.

En la entrada del colegio hay un cartel que denuncia: “Tres meses sin comedor escolar ¡Basta ya!”. El conflicto empezó en noviembre cuando las familias se negaron a aceptar las nuevas condiciones del servicio. Según cuentan, se habían recortado horas y personal, de siete monitores a cinco.

Carmen Muñoz, de la asociación de padres, advierte de que no llevarán a sus hijos al colegio hasta que no abra el comedor. Defiende que el colectivo de familias se plantara contra la nueva adjudicataria, porque, según dice, las condiciones empeoraban mucho y no se garantiza la asistencia adecuada a los 180 alumnos que tienen plaza en el comedor.

Desde noviembre, este servicio se ha ido prestando de forma intermitente por la colaboración de profesores y padres, que se han turnado en la atención a los niños y el reparto de la comida que prepara el centro, ya que tiene cocina propia –dos cocineros y otros tantos ayudantes de cocina.

 El profesorado vive esta situación con preocupación. Pedro Jesús Marina, director del centro, teme que se prolongue la protesta y que el tiempo sin clase afecte al rendimiento de los alumnos. También, lamenta que no se haya podido alcanzar un acuerdo con la Junta sobre el comedor escolar, un “servicio muy necesario”  para el alumnado de Marinaleda.

Estas familias aseguran que no temen asumir responsabilidades legales, por no llevar a sus hijos al colegio y prolongar un periodo de absentismo escolar. Integrantes de la asociación de padres y del Ayuntamiento de Marinaleda, gobernado por Juan Manuel Sánchez Gordillo, han trasladado este martes las reivindicaciones a la delegada de Educación, Francisca Aparicio, en una reunión en Sevilla. Los padres esperan una respuesta.