Andalucía Centro

El Club Balonmano Ángel Ximénez consiguió la permanencia el pasado domingo tras arrollar al Bidasoa Irún 33-25 en un partido que era el todo o nada por mantener la categoría en la Liga Asobal. Un objetivo que se logró y en el que formó parte Álvaro de Hita, protagonista porque a sus 48 años, firmó casi un 40% de efectividad para que los suyos puedan jugar por decimotercera temporada consecutiva en la máxima categoría del balonmano español, unos números que le valieron para estar en el 7 Ideal de la última jornada de la competición. 

De ahí la felicidad al finalizar el partido y las lágrimas de un Álvaro de Hita que se emocionaba a sus 48 años tras toda una vida jugando a este deporte. "El balonmano es mi vida, el Club Ángel Ximénez es mi vida y conseguirlo así, de esta manera...no puedo describirlo, somos humanos y en ese momento explotó todo". 

El guardameta, uno de los capitanes, que suma 12 años en la entidad, nos detalla como fue el camino que recorrió el equipo desde la apabullante derrota que sufrió ante el Bada Huesca y que lo ponía en una situación muy delicada. "Miraba las caras de mis compañeros y estábamos hundidos. Pero pasan los días y te recompones. Comienzas de nuevo. Hubo un compañero que me dijo, que para él, esta semana yo era lo que más apreciaba en esta vida. El vestuario no se merecía acabar mal. El sábado, no había nadie que no creyera en la salvación. 

Y para ello, también ha sido fundamental el Pabellón Alcalde Miguel Salas, que registró una de sus mejores entradas de toda la historia, con lleno absoluto y más de 1.000 personas apoyando a los suyos. "Se lo comentaba a los aficionados, ese calentamiento previo yo no lo he vivido en mis 12 años aquí. No nos oíamos".

Puedes escuchar las palabras de Álvaro de Hita y toda su emoción, a partir del minuto 35, en SER Lucena.