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El pleno en el Ayuntamiento de Puente Genil ha acordado suspender de forma cautelar la sanción a la empresa Aqualia, la concesionaria del servicio de agua, por los cortes en el suministro que afectaron a unos 300 vecinos de la urbanización de La Cañada de la Plata en julio del año pasado. Se paraliza ahora la imposición de la multa de 30.000 euros que el Consistorio acordó imponerle por falta grave. La decisión adoptada en el pleno con los votos a favor de PSOE y PP se fundamenta en que hay que esperar a contar con una resolución judicial definitiva.

El alcalde de Puente Genil, Esteban Morales (PSOE), insiste en que esta decisión no supone perdonar a la empresa, sino que es una fórmula de Derecho, mientras se obtiene la respuesta definitiva del juzgado de lo contencioso.

Izquierda Unida votó en contra. Su portavoz, Jesús David Sánchez, lamenta que se tenga esta consideración con la empresa, ante un expediente sancionador por “falta  muy grave”. La coalición de izquierdas lamenta que la paralización del cobro de la multa “confirma las sospechas de que la sanción fue una operación de lavado de imagen del PSOE”.

Se trata del segundo expediente sancionador contra Aqualia, la concesionaria del servicio de aguas en Puente Genil desde hace 20 años. 

La empresa tiene prorrogado el contrato hasta el año 2022. Izquierda aboga por la remunicipación del servicio. El gobierno municipal asegura que habrá que estudiar a medio plazo qué formula es la más beneficiosa para el Ayuntamiento en la gestión del servicio de aguas. Deja claro que volver asumir la gestión directa del suministro de agua de momento no está sobre la mesa.