Lucena

Diez detenidos y 23.000 kilos de tabaco de contrabando intervenidos en dos naves de Lucena

Viernes, 15 Noviembre 2019 14:51 Redaccion 
La Guardia Civil asegura que la producción ilegal era distribuida a todo el territorio nacional y a más países de Europa
La Operación O’Toole, practicada en tres naves industriales de Lucena, ha finalizado con la detención de diez personas y la aprehensión de 23.000 kilogramos de picadura de tabaco de contrabando, 12.000 cajetillas y más de 10.000 cigarrillos liados. A todo ello se añade la intervención de 10.000 euros en billetes fraccionados.

Guardias Civiles de la compañía de Lucena han desmantelado una supuesta organización delictiva que generaba “grandes cantidades de tabaco, de forma ilegal” en dos propiedades ubicadas en un Polígono Industrial de la localidad. La investigación concluye que la producción era distribuida a todo el territorio nacional y exportaba a países de Europa.

Ocho de los arrestados proceden del este del continente, otro de Marruecos y uno último de España y sus edades están comprendidas entre los 32 y los 61 años. A todos ellos les son atribuidos delitos contra la hacienda pública, contrabando, organización criminal y contra la propiedad industrial, así como la fabricación, venta y distribución de labores de tabaco.

El Instituto Armado ha practicado registros en tres naves industriales de Lucena, dos de ellas contiguas, requisándose, además, 6.000 filtros, 19 garrafas de pegamento, seis palés de rollo de papel de fumar, dos camiones, dos turismos y siete palés de cajas de cartón para el embalaje de las cajetillas. En la tercera de las instalaciones, los agentes hallaron un camión cargado con 12.000 cajetillas de tabaco.

En su conjunto, las superficies utilizadas por este grupo criminal disponían de capacidad para obtener 600.000 euros de beneficios cada 12 días.

Las indagaciones arrancaron a mediados del pasado mes de octubre, a consecuencia de una actuación patrulla de la Guardia Civil de la Compañía de Lucena, en el interior de un garaje ubicado en una pedanía, donde se localizaron 182 kilogramos de hoja y picadura de tabaco, que ocultaba a un vecino de la localidad de Écija, de 40 años de edad, quien supuestamente se estaba dedicando al envío de tabaco de contrabando por todo el territorio nacional, sirviéndose para ello de varias empresas de transporte de paquetería.

Investigaciones posteriores permitieron sospechar que en la zona pudiera ubicarse una organización delictiva cuya actividad pudiera ser la fabricación, elaboración y distribución de cigarros a partir de tabaco picado de manera ilegal, ya que se desconocía la procedencia de la picadura con la que se elaboraban los cigarrillos.

Ante ello, se estableció un dispositivo de servicio que permitió ubicar dos naves en uno de los polígonos industriales de Lucena en cuyo interior pudieran estar dedicándose a la fabricación de cigarrillos de tabaco de contrabando. El registro de las dos naves ha permitido desmantelar una fábrica dotada de toda clase maquinaria para la fabricación de cigarrillos de tabaco.

Para el trabajo en el interior de la nave, captaban a los operarios en países del Este de Europa para trabajar por periodos de un mes aproximadamente. Estos trabajadores vivían en el interior de la nave durante toda la estancia y eran reemplazados continuamente.