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El voto afirmativo del Partido Popular propicia la aprobación del presupuesto municipal del Ayuntamiento de Lucena defendido por el equipo de gobierno socialista.

La aceptación, por parte del PSOE, de 11 enmiendas planteadas por el Partido Popular, y cuyo importe total bordea el medio millón de euros, ha confluido en un acuerdo entre ambas formaciones, mayoritarias en el Pleno, que redunda en la homologación del documento financiero municipal para 2019.

Una estimación económica, rechazada por Ciudadanos, Izquierda Unida y el concejal no adscrito, Vicente Dalda, ponderada, desde el equipo de gobierno, porque, señalan, favorece la sostenibilidad, la inversión, la protección social y la estabilidad previa al contexto electoral.

El montante crece en un 4%, cuantificándose en 43,3 millones. Un incremento que se sustenta en el aumento de las aportaciones externas, así como en la subida de los recursos autonómicos que engrosan programas relativos a la Ayuda a Domicilio, la Atención Temprana y el Centro de Información a la Mujer. En el mismo sentido, el gasto por habitante se fortalece, mínimamente, desde los 967 a los 1.018 euros.

Araceli Bergillos, concejal delegada de Hacienda, indicaba que “la inversión en políticas sociales alcanza los 4,7 millones, un 8,5% más que en 2018”. A ello, agregaba, “hay que sumar 1,3 millones en políticas de fomento del empleo”. Bergillos también destacaba el carácter “inversor” de esta previsión porque “se construye, desde los barrios, unos espacios más acogedores, confortables, y atractivos para toda la ciudadanía, para quienes residimos en ella y para quienes nos visitan”. En este sentido, puntualizaba que “veremos cambios en los suelos de parques infantiles, el inicio de la pasarela que una el Recinto Ferial y la zona de la estación, en colegios pero, sobre todo este año, inversiones de las que no se ven pero que se notan, como cambios de luminaria y en la red de saneamiento”.

Entre otros epígrafes, en el capítulo de inversiones, que acapara 5,7 millones, se estipulan 325.000 euros a la segunda fase de la remodelación de la calle Mediabarba; 110.000 son destinados a la regulación semafórica del comprometido cruce en la calle Corazón de Jesús; imputándose, 120.000 euros, a un espacio, anexo al Cementerio de San Jorge, reservado al rito musulmán.

Una subvención de 700.000 euros, procedente de la Unión Europea, posibilita sustituir 2.142 puntos de luz en el contorno del centro urbano. Las intervenciones tendentes a reforzar la eficiencia energética se completan con una inyección de casi 600.000 euros, vinculada al Plan EDUSI, consistente en renovar 1.000 luminarias en centros educativos y otras actuaciones en el Colegio Nuestra Señora del Carmen, la Casa Consistorial y la Jefatura de la Policía Local.

A la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado se conectan la construcción de una pasarela que una el Recinto Ferial y el discutido Parque de la Estación, la ejecución del Pabellón en el sector oeste, la renovación del césped de los campos de fútbol de la Ciudad Deportiva y la adaptación de un módulo para el servicio de comedor en el colegio Virgen de Araceli. Otro proyecto de envergadura es el inicio de la reparación de la conducción de agua desde el Manantial de Zambra.

Este mandato corporativo comenzaba con un respaldo a los presupuestos del Partido Popular que ahora se reedita. En los dos años centrales, esta formación optaba por la abstención. María de la O Redondo, edil popular, manifestó gratitud al equipo de gobierno por su capacidad negociadora, la predisposición al consenso y su pretensión de integrar peticiones.
 
Redondo justificaba esta posición “porque entendemos que se han incluido, haciendo suyas,  nuestras propuestas, una serie de proyectos muy importantes para Lucena; podíamos haber sacado tajada políticamente y haber hecho daño al PSOE, con que el último año de su legislatura, no tuvieran presupuesto, pero se hubieran podido poner en peligro inversiones muy importantes y entendemos que los verdaderos perdedores son los lucentinos”. Concluía, en tono irónico, apuntando que “lo adoptamos con el pleno convencimiento de que seremos nosotros los que ejecutaremos en el segundo semestre del año que viene”. El alcalde, espontáneamente, replicaba, repitiendo “eso me ha dolido”.

Risas y comentarios cómplices que ratifican la absoluta y sorpresiva sintonía, entre el PSOE y el PP. El PP sostiene que sus demandas son razonables y están repletas de sentido común. Entre otras demandas, se incorporan al presupuesto el incremento de 65.000 euros en las retribuciones al personal laboral temporal; exenciones en el IBI de naturaleza urbana por valor de 50.000 euros; una cuantía base de 100.000 euros para techar la pista municipal anexa al colegio Antonio Machado; la habilitación de un corredor accesible en el Paseo de Rojas, cifrada en 126.000 euros; 30.000 euros para implementar mejoras en el Polígono La Viñuela y elevar los convenios con la Agrupación de Cofradías y Peña Amigos de los Magos, en 10.500 y 6.000 euros, respectivamente.

Desde Ciudadanos, que, por ejemplo, entre 14 enunciados, reclamó, sin éxito, acrecentar, en 100.000 euros, la partida de Fiestas, a fin de promover un concierto de primer nivel, o, por segunda vez, fijar un compromiso de pago a las comunidades de Suvilusa y ampliar en 100.000 euros, el dinero asignado al asfaltado de La Viñuela, su portavoz, Puri Joyera, les reprochaba a los socialistas, que una vez sellado el pacto con el PP, no había interés en negociar con otras fuerzas políticas. “Cosas que se aprobaron en nuestro plan de presupuestos, como es el plan de mejora de La Viñuela, se han vuelto a aprobar en Pleno, porque no se han hecho”, les espetaba a los socialistas. Proseguía Joyera sosteniendo que “ni se ha hecho lo que se acordó en pleno del año pasado, ni lo que se acordó en pactos de presupuestos a estas alturas, me pregunto, con unas elecciones de por medio, independiente, de que luego gobiernen ustedes sí o no, cómo van a ejecutar todo lo que han propuesto, es más, si no se hubieses aprobado este presupuesto, si se prorrogase el anterior en nada hubiera variado”.

Izquierda Unida, especialmente crítica con la gestión socialista, le afeaba al equipo de gobierno, que este texto no responde a un proyecto nítido de ciudad, descarta priorizar gastos para custodiar servicios básicos y refleja una disminución real en Servicios Sociales. “Se ha negociado con el PP, con la derecha, no es nada nuevo, lo vienen ustedes haciendo desde que comenzó la legislatura, la legitimidad absoluta de gobernar con la derecha es total y absoluta, pero desde el punto de vista de la sangre roja, socialista, que debiera tener ese Partido Socialista, no sabemos si obrero y español sin duda que sí, parece haberse esfumado, ha cambiado el color y no ha demostrado a lo largo de esta legislatura, haber tenido proyectos pactados con la izquierda”, exponía Miguel Villa, portavoz de IU.

Villa censuró la actitud del PSOE, contraria a la cortesía institucional, por no aceptar, ni siquiera estudiar, las 40 propuestas de Izquierda Unida, como dedicar 1,2 millones de euros a la primera fase de ejecución de las obras en la red de alcantarillado del Barrio de Quiebracarretas, ampliar la jornada del psicólogo en el Centro Municipal de Información a la Mujer; establecer un calendario que favorezca la aprobación definitiva del acuerdo marco y de la Valoración de Puestos de Trabajo del personal de la Administración Local; o la instauración de una Oficina de Atención Vecinal.
 
Finalmente, el edil no adscrito, Vicente Dalda, confirmó su voto negativo a los presupuestos por no asegurar medio millón de euros al cubrimiento del terreno deportivo multiusos que se brindará al colegio Antonio Machado. En su alocución censuraba que “volvemos a que no todos los vecinos de Lucena sean iguales en este a Ayuntamiento, hemos mejorado convenios a unos sí y a otros no, y esto es de una desigualdad manifiesta, la prueba está, que las peticiones del PP han sido para mejorar convenios, con los cazadores y club de tiro y otros más, lo entiendo que el PP quiera mejorar los convenios con sus amigos o conocidos o más cercanos, el PP pretende cambiar el sistema clientelar del PSOE, pero cambiando a los clientes, no el sistema, por lo que ahora más que nunca me reafirmo, hay  que acabar con la lacra de los convenios en nuestra ciudad.

El equipo de gobierno prevé reducir la deuda con entidades bancarias con 2,3 millones, hasta contraer el déficit a largo plazo a 11,44 millones, un 27,45% de los ingresos corrientes. El presupuesto global, aunando al PDM, Suvilusa, EPEL y Aguas de Lucena, organismos cuyas cuentas también se han verificado, se sitúa en 44,7 millones.