Estepa

Olivareros de La Puebla, Pedrera y Villanueva de San Juan piden en Madrid precios justos para la supervivencia de los pueblos

Jueves, 10 Octubre 2019 15:31 Redaccion 
Reivindican el olivar tradicional y reclaman a Europa una defensa férrea ante los aranceles de EEUU
Olivareros de la Sierra Sur y La Campiña sevillana también han participado este jueves en la manifestación en Madrid reclamando precios justos y en defensa de un sector amenazado ahora por los aranceles de Estados Unidos. Autocares con decenas de agricultores han salido esta madrugada de localidades como Pedrera, La Puebla de Cazalla y Villanueva de San Juan, entre otros puntos, organizados por las cooperativas y ayuntamientos. Los participantes en la marcha, convocadas por las organizaciones agrarias en todo el país, han reclamado a las instituciones que se tomen en serio la protección de un cultivo del que depende el futuro de los municipios del centro de Andalucía.
 
Ramón, agricultor de Pedrera, se ha sumado a la protesta. Lleva toda la vida trabajando en el campo, antes como jornalero y ahora como socio cooperativista en una finca de algo más de 100 hectáreas de olivar con otros nueve productores. Explica que el sector está atravesando un momento duro: por la climatología –una sequía que está dañando el fruto y los efectos de la gota fría-, los precios bajos en origen, la extensión del olivar supintensivo y ahora con los aranceles que quiere imponer la Administración Trump. Considera que hay que alzar la voz para que el Gobierno reclame a Europa  una posición firme en defensa de un cultivo que es la base social, cultural y económica de muchos pueblos andaluces.  
 
Gabriel, que lleva 25 años como productor olivarero en Villanueva de San Juan, también piensa que Europa debe reaccionar para que se garantice la supervivencia de este sector y de los municipios. Y alerta de que si se confirman los aranceles del 25 al aceite de oliva, mantener las explotaciones va a resultar inviable.
 
Ramón García, responsable de COAG Sevilla, recalca que el sector lleva mucho tiempo soportando la falta de rentabilidad del cultivo por la especulación y advierte de que los aranceles de Estados Unidos van a repecutir todavía más en el productor. Incide en pérdidas en el campo por los bajos precios del aceite y del riesgo de despoblamiento rural por la mengua de este cultivo.
 
Entre las demandas que reivindican los olivareros, se encuentran precios justos en origen, el almacenamiento privado y normas de autorregulación más exigentes.